EL CONCURSO DE ARQUITECTURA
Organizado por la CTBUH (Council on Tall Buildong and Urban Habitat) de Chiago, y en el marco de la Conferencia Mundial celebrada en Seúl, se organiza el Primer concurso para estudiantes, que con únicamente dos restricciones; diseñar un "Tall building" y que éste se integre en un entorno real, daba libertad a estudiantes de todas las facultades de arquitectura del mundo presentar su propuesta de edificio de altura para el futuro.
EL EQUIPO
El equipo está compuesto por Iván Valero, Anna Fernández, Guillem Villanueva y Javier Clavé, los cuatro estudiantes de último curso de la UPC-ETSAV de España.
EL PROYECTO DE ARQUITECTURA
El edificio se sitúa en la ciudad de Alicante en el sureste de España, caracterizada por su skyline mayoritariamente horizontal y de escasa altura salpicado por tres grandes edificios que compiten con el gran referente en altura, el castillo de Santa Bárbara.
Nuestro edificio trata de completar este skyline, convirtiéndose en el más alto de la ciudad, pero respetando como altura máxima de referencia, la del castillo.
Dentro de la ciudad, está situado en una zona en proceso de reforma tras la supresión de las vías del tren para dar paso a un gran parque central, convirtiéndose en el edificio referente que marca el acceso a este nuevo parque y actuando como pieza de transición entre éste y la ciudad construida.
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En contra del modelo tradicional de torre vertical, el programa se reparte entre dos torres mellizas conectadas a través de un zócalo común que genera de una fachada uniforme en las plantas más bajas. La diferencia de altura entre ellas facilita la integración con el entorno; la torre principal actúa como referente visual mientras que la segunda consigue la transición de visual.
El zócalo soluciona las transiciones entre ciudad y parque con una fachada continua y vertical con aperturas estratégicas hacia el eje comercial y una más baja y permeable, con pequeñas rampas y escaleras verdes que dan continuidad al parque llevándolo hasta la cubierta de este zócalo. Esta continuidad del parque se traslada por el corazón del edificio hasta la parte más alta de las torres, mediante un gran patio central que genera ventilación natural rebajando la temperatura del edificio y en el que se colocarán pequeñas plantas trepadoras que colonizarán la estructura, de esta forma, el verde va subiendo, y en determinados puntos, sale al exterior de nuevo a través de unos grandes espacios mirador con capacidad para plantar grandes árboles y que se colocan estratégicamente buscando las mejores vistas y que puedan recibir la máxima cantidad de sol posible.
La estructura es la que posibilita la creación de estos grandes espacios mirador, mediante un sistema de grandes pilares centrales de los que vuelan unas cerchas metálicas entrelazadas que generan una estructura tridimensional. De estas cerchas, descuelgan unos tirantes que suspenden los forjados, liberando los espacios-mirador de pilares. El espacio libre que genera el gran canto de las cerchas se aprovecha para albergar, dependiendo de la situación de la cercha, maquinaria, el tratamiento de los residuos del edificio, o la tierra vegetal donde colocar los árboles.
Apostamos por un programa de usos mixtos, donde se combinan comercios, restaurantes, oficinas, hoteles y residencias de lujo buscando la máxima concentración de gente a lo largo de la máxima cantidad de horas al día, convirtiendo el edificio en un referente del encuentro social de la ciudad.
La fuerte radiación solar que deberá soportar el edificio dada su orientación se contrarresta con una piel exterior que hace de parasol protegiendo la fachada que dependido de las estaciones puede ser más permeable (ventilada) o más cerrada (efecto invernadero). Esta segunda piel, se compone de piezas cuadradas apoyadas en unos montantes y formadas por una capa de vidrio de baja emisividad con células fotovoltaicas, que aportan sombra (sostenibilidad pasiva) y producen energía (sostenibilidad activa) de forma que el edificio se convierte en una gran central eléctrica de energía solar, con capacidad de autoabastecerse y de aportar electricidad a la red. Con estas piezas cuadradas, y mediante la alteración de la densidad de células fotovoltaicas en cada una de ellas, se consigue un sistema de píxeles que van del azul más oscuro al más claro, y que combinándolas, se consigue la imagen final del edificio como un reflejo conceptual de las olas del mar que tiene delante..
